KIN-BALL​​ TEAM

En los últimos años, las nuevas tecnologías han revolucionado nuestra forma de vida, otorgando a la sociedad un acceso sin precedentes a grandes cantidades de información. Como usuarios digitales, hemos evolucionado de simples consumidores a "prosumidores," es decir, no solo consumimos contenido, sino que también lo creamos y manipulamos, principalmente a través de dispositivos como smartphones y tabletas. Sin embargo, este aumento en el uso digital ha traído consigo el riesgo de desarrollar comportamientos adictivos.

Uno de los principales focos del intercambio fue abordar el problema de la ludopatía, reconocida como enfermedad por la Organización Mundial de la Salud (OMS), junto con otras adicciones relacionadas, como los videojuegos y las redes sociales. A diferencia de las adicciones a sustancias, las adicciones digitales suelen pasar desapercibidas durante más tiempo debido a la falta de síntomas visibles. La facilidad de acceso a préstamos y microcréditos, con intereses disfrazados en letra pequeña, también puede agravar la situación.

Durante el intercambio, los participantes exploraron las diferencias entre el uso responsable de las tecnologías digitales y los comportamientos adictivos, que comparten similitudes con las adicciones a sustancias, como la necesidad de un mayor consumo, síntomas de abstinencia, alteraciones en los patrones de sueño y alimentación, y el aislamiento social.